Entre los espacios que más uso se dan en una vivienda está el baño. Cuando nos proponemos hacer en ese espacio una reforma, podemos empezar a perfilar nuestra idea sin que se trate de un proyecto complejo ni caro. Desde la sustitución de sanitarios, cambio en alicatado, suelo, iluminación, o un diseño diferente, la reforma en el baño puede aportar un toque de distinción a nuestro hogar.
Para que nuestro proyecto de reforma se lleve a cabo de la mejor forma posible, hay una serie de pautas que es muy conveniente seguir. Lo resumiremos en cinco consejos:
1. Una correcta planificación. Tenemos que hacer una reflexión sobre los elementos a reformar, un listado de aparatos, espejos, elementos modulares, grifería, sanitarios, etc., incluyendo la limpieza. Pediremos presupuestos a varias empresas y compararemos.
Si se trata de ganar espacio porque el baño es reducido, la eliminación del bidé y la sustitución de la bañera por una ducha son dos buenas soluciones, además de adaptarse a los hábitos de hoy día donde es más rápido una ducha, que el uso de bañera y el bidé. Para ganar espacio con las puertas, lo mejor es usarlas correderas.
Es importante considerar que la modificación de la ubicación del inodoro es uno de los cambios más complejos, pues la bajante se suele dirigir por debajo del forjado, incluso por la vivienda de abajo si el edificio pertenece a una comunidad de vecinos.
2. El presupuesto. Tanto si se solicita por Internet, para encontrar al profesional que mejor se ajusta al dinero previsto para la reforma, como si recurrimos a una empresa conocida o de confianza, es preciso pedir un presupuesto muy detallado. Es importante que todo esté por escrito, incluidos los plazos, tanto de comienzo como de fin de reforma.
Entre las modalidades para llevar a cabo la reforma, es posible elegir entre contratar cada profesional de forma independiente, adquiriendo nosotros mismos los materiales y coordinando la reforma, o bien realizar un contrato con una empresa que se encargue del proyecto entero, lo que se llama “llave en mano”. Si no se tiene experiencia, lo mejor es elegir la segunda opción, primero porque el presupuesto será más económico, y segundo porque la coordinación entre los profesionales de la reforma será más funcional. En Aresan disponemos de una promoción para reformar su baño.
3. Sanitarios.Son el elemento principal del baño. En los primeros pasos del análisis de la reforma, está el estudio de la necesidad de sustituirlos o conservarlos. Una buena idea puede ser mantener algunos elementos modulares, pero sustituyendo la grifería por una con un diseño innovador. Por ejemplo, el caso del baño.
4. Alicatado. Los azulejos del baño se van desgastando con el paso del tiempo, la humedad del espacio, condensación de vapores, etc. Por tanto llega un momento en que procede su recambio. También hay algunas soluciones para aplicar productos sobre el alicatado existente y poder mantenerlo. En el caso de que haya humedades, lo mejor es cambiarlo por completo.
5. Iluminación. El baño es un espacio destinado a la higiene personal, que incluye afeitado, depilación, y otras acciones para las que se precisa una buena iluminación. Suelen instalarse dos puntos, uno en el espejo y otro en el techo. Pero para conseguir un efecto más amplio, puede instalarse más de un espejo.
Si necesita más información o un presupuesto para la reforma de su baño, no dude en ponerse en contacto con nosotros, somos especialistas en reformas de todo tipo.